lunes, 8 de julio de 2019

La historia de Mark (Capítulo VI)


El sol hacía su mejor puesta, mientras el lente de la cámara no se detenía, tomaba fotos una y otra vez buscando la mejor toma. Así pasaba el rato mientras se internaba en el monte buscando un mejor paisaje. Sin embargo la cámara se quedó corta de batería y Mark ya estaba un poco cansado, por lo que sacó de su mochila un refrigerio para sentarse a descansar a orillas del lago.

Al terminar sacó un cigarrillo y lo encendió, mientras recordaba cómo una de sus compañeras de trabajo le recriminaba por su falta de interés por las relaciones de pareja.

-En serio Mark, no puedo creer que a una persona como tú, inteligente y apuesto, le cueste conseguir pareja-
-No te engañes Sara, no me cuesta conseguirla, soy consciente de lo que tengo para dar-
-A veces aparentas no tener sentimientos, pero cuando te conocen bien eres una persona muy agradable-
-El problema es que me cuesta expresar mis sentimientos, muchas veces lo único que busco es un cálido abrazo que me anime, me puedo convertir en el más detallista del mundo, pero muchas veces he dado más de lo que puedo y no siempre se recibe lo mismo de otras personas, tal vez fue por eso que me volví muy solitario y empecé a preocuparme solo por mi. Pero la mayoría de mis problemas en mi vida amorosa han sido por no expresar mis sentimientos a tiempo. En el trabajo soy el más brillante, rendidor e innovador pero en lo sentimental me cuesta mostrar mis sentimientos-
-Deberías trabajar más esa área, te esfuerzas mucho en tu trabajo y eso está bien, pero en exceso también es malo, sal de la rutina, no solamente ir a pescar, puedes hacer planes que incluyan amigas. Eso puede ayudarte mucho para que no te sientas tan solo-
-Eso es lo que yo más quisiera, pero como te has dado cuenta... soy algo tímido para expresar sentimientos.-
Hubo un silencio. -Como amigo soy el mejor, sobran las explicaciones-
-Es por eso que me siento extrañada que a una persona como tú, amigable, agradable, detallista y atento le cueste encontrar pareja.-
-Pero...-
-Sí Mark, soy consciente que eres una persona exigente y eso es bueno, pero debes dejar ese pensamiento tan cerrado y asumir más riesgos en el amor-
-Lo que no hice antes de los 25 no creo poderlo hacer ahora que he llegado al tercer piso-
-¡Sí puedes hacerlo! ¡Tú eres quien pone los límites! ¡Ábrete a la vida! ¡No te cierres al amor!-

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